AZUL CASI VERDE PN21
Cindy Muñoz Sánchez Fotofanzine
Esta documentación emerge de vivir a tres cuadras del epicentro del paro nacional colombiano de 2021, en el barrio de toda la vida de mi familia paterna, que se había resignificado como Puerto Resistencia, anteriormente Puerto Rellena. En ese momento quería conectar con mi primer territorio, el cual habitaba mi familia desde que emigró a Cali en los sesenta. Quería hablar de las memorias de mi padre, de mis abuelas y bisabuelos. Pero el presente nos tocó la puerta. Al estar cerca, vivimos el conflicto directamente; los primeros días el ESMAD llegó hasta nuestra puerta, los gases entraron a la casa. Muchas veces el paisaje nocturno eran las balas, los aviones y el miedo. Ya sabíamos lo que era pasar hambre, dormir con balas, enterrar amigos desde pequeñes. Vencimos el miedo. Que lo sepa todo el mundo. La periferia de una ciudad periférica como Cali es la que puso los primeros muertos. Cuando la minga indígena llegó, la vida nos abrazó. La minga apoyó a las personas a las que estaban masacrando, pero fue recibida a plomo por los llamados “gente de bien” de clase alta que visten de blanco. En el barrio dicen que la minga llegó a compartir acciones de cuidado.
Mi padre me contaba sus historias juveniles del barrio desde mis primeros años. Siempre recordaba que entre sus amigos se decía que no habían nacido para semillas. Estas fotografías me conectaron con los procesos barriales, y así llegué a las huertas del territorio. La resistencia continúa con gestos de vida y cuidado; los llamados nadie ahora se sueñan semillas y creen en la autonomía alimentaria. Soñar la transformación y habitar el paisaje barrial. Quería que estas fotografías fueran más que una cobertura de un acontecimiento; quería continuar acompañando los procesos de mis pares, así que seguí caminando no solo desde la cámara, sino desde mi cuerpa/e con la siembra. Esta documentación se hizo entre 2021 y 2022, se expuso en el Museo La Tertulia, la Comisión de la Verdad, Alemania y Suiza con colectivos de resistencias integrados en su mayoría por migrantes colombianos, además de que algunas fotografías fueron publicadas en medios alternativos y oficiales a nivel nacional e internacional.
Mi padre me contaba sus historias juveniles del barrio desde mis primeros años. Siempre recordaba que entre sus amigos se decía que no habían nacido para semillas. Estas fotografías me conectaron con los procesos barriales, y así llegué a las huertas del territorio. La resistencia continúa con gestos de vida y cuidado; los llamados nadie ahora se sueñan semillas y creen en la autonomía alimentaria. Soñar la transformación y habitar el paisaje barrial. Quería que estas fotografías fueran más que una cobertura de un acontecimiento; quería continuar acompañando los procesos de mis pares, así que seguí caminando no solo desde la cámara, sino desde mi cuerpa/e con la siembra. Esta documentación se hizo entre 2021 y 2022, se expuso en el Museo La Tertulia, la Comisión de la Verdad, Alemania y Suiza con colectivos de resistencias integrados en su mayoría por migrantes colombianos, además de que algunas fotografías fueron publicadas en medios alternativos y oficiales a nivel nacional e internacional.
